Quizás nuestros problemas vengan todos de un punto en concreto. Quizás sea porque no vivímos el presente. Tras mucho tiempo observando a la gente, me he dado cuenta de que, nos preocupamos más por lo que ya ha pasado y por lo que pasará, que por lo que está pasando en el momento. Vivimos con esperanzas de que mañana amanecerá y de que ayer anocheció, no valoramos lo que tenemos en el momento. ¿Y si no hubiera un mañana y no hubiera un ayer? Deberíamos de valorar más lo que tenemos en el instante, porque el pasado ya pasó y el futuro depende de un fino hilo. Nos aferramos tanto al 'qué pasará' y al 'pues pasó' que nos nublamos nosotros mismos la vista. Que lo que tenemos en este momento, alomejor mañana ya no está, y entonces, entonces es cuando nos daremos cuenta de que deberíamos de haber cambiado algo. Valora lo que tienes antes de perderlo.
Fmdo: Belén del Caz Maroto.
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