Otro verano se acaba...

Escritorio desordenado, lleno de bolígrafos, libros, la vela que tanto me gusta su olor... suena Ludovico, concretamente "Fly", es estupendo, y tener esa dudilla de saber cuál canción irá después en la lista de reproducción de Spotify lo es aún mas. Mi corazón late a mil, estoy tensa, lo juro, de pensar si se me puede olvidar todo lo que quiero plasmar, también nerviosa, inquietante, sonrío, já, sonrío por verme de nuevo haciendo algo que me llena tanto, que me complementa. Sé que si de mí dependiera, estaría día tras día escribiendo, pero también sé que necesito meses de inspiración y tiempo para poder dejar volar a mi imaginación. Respiro hondo, suena "Night", me voy relajando, subo el volumen, ya estoy en mi hogar. Cierro los ojos, vuelvo a respirar hondo y decido mirar atrás en el tiempo, no mucho, porque puede hacer daño, sino mirar a todos estos meses que he fallado a escribiros, escribirme. 

Siempre me pasa lo mismo, es frustrante, no sé como empezar a hablar de la etapa maravillosa que estoy pasando y que llevo pasando todo el año.

Puedo decir que empezó con mi "Serendipia" aquella persona que ha sido mi salvavidas, un apoyo gigante, como él, y aún siendo gigante y yo una miguita de pan, me hace tocar el cielo. Me ha ayudado a reencontrarme con mi yo auténtico (que un día se perdió y por más que lo buscaba se escondía y no se dejaba ver). Suena "Divenire" una de mis favoritas, y qué mejor para describirle, describirte. 

Siento angustia en el pecho, porque viene la mejor parte de la canción y se me han colapsado todas las palabras. Eres indescriptible, como lo que me has hecho y haces sentir. Llegaste en el momento perfecto y oportuno, con tu sonrisa de oreja a oreja, cosiéndonos las heridas mutuamente y dejando al desnudo nuestras cicatrices. 

Tengo un nudo en la garganta y vuelvo a estar tensa, no quiero llorar, esta vez no, me tiembla la mano izquierda.

Suena "I Giorni" mágica.

Aunque no lo diga, siempre he pensado que las personas somos lo suficientemente capaces de cuidarnos solas, de querernos, de odiarnos, de vivir. Ahora vienen los peros. 

No sé si es porque desde una etapa mala, muy mala de mi vida, dejé que mis sentimientos estuvieran a flor de piel o porque te echo de menos cada uno de mis días. No lo sé, pero me acuerdo perfectamente de que antes de que te fueras parecía más fuerte, mi coraza estaba intacta, sin un rasguño. Desgraciadamente con el paso del tiempo y de las lágrimas, se ha ido haciendo finita finita, como un hilo de seda. No te culpo, claro que no, al contrario, a la vez que pasa más el tiempo, voy reconstruyéndola poquito a poquito, con personas que me ayudan y conmigo misma también. Contigo desde ahí arriba también, lo sé, gracias a ti he podido ir reconstruyendo mi armadura, pero esta vez por los "golpes" de la vida, por cosas mías, provocadas por mi y por subidas provocadas por mi también. Aún queda ese fino hilito de seda de la coraza de cuando era una niña, de cuando tú te fuiste, la diferencia es que ahora se ha ido llenando de más hilitos de seda, gracias a que he podido hacerlo "sola". 

Como pasa el tiempo..¿eh? 5 años ya...que sepas que tengo la suerte de seguir recordando tu sonrisa, tu cojeo de pierna derecha, tu voz, tu pelo blanco, tus manos regorditas, tus bromas....Ay.

Suena "Nuvole Bianche" mi favorita, la que siempre llama a las gotitas de agua que se esconden en los ojos, para que bajen por las mejillas para poder escucharla. 

Hablemos del curso, del verano y de esta nueva etapa que acabo de emprender.

No he podido ser más feliz estos meses, no me han podido hacer más feliz, de verdad que no.

Mis chicas y chicos de clase, no de este año, sino de todos los que han estado a mi lado, mejor dicho, en un rinconcito de mi corazón, y que siguen y van a seguir ahí por mucho tiempo. Me han visto ser como soy realmente. Risas, lloros, agobios, bromas, bailes, canciones...un curso estupendo.

El verano,,, ay, el verano... siempre igual, siempre mágico, siempre en Samboal. Mi pequeño paraíso, refugio y hogar. Hogar que si no fuera por ellos no podría dar sentido a esa palabra. Cada verano que pasamos allí me hago más enorme, de pedacitos de vosotros; año tras año. 

La familia...no hay palabras para describir el amor que recibo estando allí en verano, durante el curso, en mis idas y venidas, bajadas y caídas... no he visto mentores y apoyos más fuertes y necesarios.

Suena "Primavera" y no puedo estar más contenta de estar acabando esta entrada tan necesaria y especial para mi...

Solo me queda decir, que este curso que viene tiene pinta de ser tan maravilloso como horroroso, pero que con las amistades que han venido conmigo, paso a paso, durante estos 4 años, todo es más fácil y llevadero, y más aún con las amistades que se retoman del pasado porque estaban un poco estancadas, que poquito a poquito, como esos hilos de seda de los que hablaba antes, se van juntando de nuevo.

Deciros que 'no solo respirar es vivir' y que por eso VIVÁIS, VIVÁIS de verdad. Sed buenos compañeros de aventuras. Hasta pronto. 

Clímax, final feliz.

Bueno, voy a poner la típica escusa de 'año nuevo...tatatá' en verdad es una escusa para justificar el poco tiempo que he dedicado a pararme, sentarme frente al ordenador y escribir para vosotros, para mi. Pero bueno, como bien sabéis, hay cosas que no tienen justificación alguna, así que, vengo con una entrada nueva, probablemente una de las primeras (si no es la única) que escribo cuando realmente me encuentro estable con mi ánimo. ¡Allá voy!
No sé realmente como empezar ni por donde, ya que tengo que echar mucho la vista a atrás.
Todo empezó en verano, no ha sido el mejor verano de mi vida, ya que no me encontraba realmente a gusto con nada, nada de lo que hacía me llenaba, nada me daba a chispa que necesito para estar bien.
No todo ha sido malo, hay momentos de este verano (y personas) que no los cambiaría por nada, por nadie. Tuve algún que otro problemilla de confianza en algunas personas y en mi misma, pero bueno, todo acabó con una señal (voy a decir del destino, por decir algo) que me indicó que ese camino que estaba tomando no era el correcto, ni para mi, ni para la persona que provocó esa señal.
Como dicen por ahí, las segundas oportunidades son para los valientes, o, a veces las segundas oportunidades son mejores que las primeras. Creo que fui valiente y al principio esa oportunidad fue mejor que las otras anteriores, que no fueron pocas, pero todo tiene un fin, bueno o malo, pero lo tiene. Siempre digo que de todo lo malo siempre hay algo bueno que destaca, y me dejé querer, me dejé querer por mi, amor de mi para mi. Descubrí que la esencia de la vida, está en no enfocar toda nuestra atención a los problemas que nos redean, que nos perturban, sino enfocarla a la solución de todos estos. Es como cuando te caes y te haces una herida, al principio muestras mucha atención al dolor que te causa esa herida, pero al fin y al cabo sabes que se va a curar y que esa yaga se va a cerrar, pero que la cicatriz siempre quedará ahí. Y por fin puedo decir, que 'el tiempo le ha sentado bien a mi pequeña cicatriz'. He vuelto a ser yo, mi yo de ayer. Hay veces que me pregunto, ¿realmente eres feliz o solo sonríes? me hago esa pregunta como unas diez veces seguidas, paro todos mis pensamientos y los enfoco a ver si realmente soy feliz, doy una ruta por todas las personas que me hacen sentir como si estuviera en casa cuando estoy con ellos, como si viniéramos del mismo lugar y fuésemos a embarcar en el mismo barco, con las mismas ideas, con las mismas ilusiones y hacia un destino extraordinario, nuestro mismo destino, directos a la felicidad.
Ahora mismo no soy plenamente feliz, nadie lo es, pero tengo esas personas que son mis chispas, las chispas que hacen que la felicidad se vea simplemente como una palabra, ya que ellos la forman.
He conocido a muchas personas en este trayecto, en el de encontrarme a mi misma, en cambio, he perdido a otras,o simplemente han desaparecido solas, pero siempre he acabado ganando algo, y estoy segura de que esas personas que se han ido, también lo han conseguido separándose de mi, por eso me alegro por ellas.
No dejo de pensar en una persona que he conocido y bueno...lo tengo que plasmar aquí.
Es una persona, que me ha hecho ver que la amistad es algo más que estar ahí siempre para todo, me ha hecho ver el valor que tiene que una persona esté ahí siempre, que se pueda contar con ella para todo, cuando digo para todo, es todo. Es una de esas personas que me hacen sentir como en casa, mejor dicho, que me hace sentir como si él fuera mi hogar, mi refugio.
Hay personas que son salvavidas, que llegan cuando menos te lo esperas, que son magníficas y que cuando estabas buscando algo totalmente distinto, vienen, te sorprenden y no te revolucionan todo, sino que te ayudan a organizar todos tus miedos y a superarlos uno a uno.
Todo caos tiene una dulce introducción, y ahora estoy viviendo un caos maravilloso. Esa dulce introducción es una persona, de esas que te sientes protegida cuando estás bajo su techo, bajo sus brazos y qué queréis que os diga, me encuentro bien, me siento llena de vida y de ilusiones y con esta "pequeña" reflexión quería trasmitiros un único mensaje, todos hemos tenido, tenemos y tendremos preocupaciones y problemas que siempre nos van a acompañar, pero amigos, os digo que busquéis la salida de todas estas cosas y si veis que no tienen, o que simplemente no queréis salir de ellos, dar el paso o intentar buscar el modo de que con estas cosillas viváis a gusto y felices. No es difícil, nada lo es, simplemente tenéis que ser más listos que ellos y tener mucha fuerza de voluntad, que si no estáis a gusto y no os encontráis bien con el modo de vida que lleváis, dar un giro a todo con vuestras manos, o simplemente dejaros querer y dejar que alguien os ayude a hacer vuestro climax un poco más intenso.
Un abrazo de esos que os dejan sin aliento.

Por y para ti, en y dentro de mi.

Me cuesta y me duele no recordar tu sonrisa. Me cuesta recordar tu voz. Menos mal que tus formas de andar nunca se me olvidarán, ya que tenías una característica particular y eso te hacía ser diferente y especial. Han pasado dos años desde que escribí una entrada diciéndote lo mucho que te echaba de menos y lo mucho que te recordaba, dos años después vuelvo a escribirte manifestando lo mucho que me haces falta, aquí, a mi lado, físicamente. He pasado por varias estapas duras desde que te fuiste, me he derrumbado, he llorado, he caído y he vuelto a subir, he triunfado y he perdido, pero me alegra saber que tengo el consuelo de escribirte y desahogarme. Me da pena no poder escribir con un motivo de felicidad, ni cuando estoy contenta y hacerlo cuando estoy melancólica y dolida, espero que con el tiempo se corrija o no. Creo que estoy pasando una etapa dura en mi vida, ya que la adolescencia se basa en conocerse a uno mismo y elegir un camino que nosotros mismos forjamos, pero nunca pensé que fuera tan difícil. Hoy tu recuerdo se ha hecho más presente que ningún otro día, por eso he vuelto a escribir, abuelo, tú me das motivos para seguir y eso me hace estar estable. Gracias por estar, sin estar. Hasta la vista.
Recuerda que eres el 'te quiero' más sincero que he dicho a lo largo de mi vida, y lo seguirás siendo.

W.

Siempre me pasa lo mismo, no tengo ni remota idea de como empezar algo que sé que va a tener fin.
Pero bueno, supongo que puedo intentar hacer algo para que quede "bonito",o bueno no, no quiero que esto sea bonito sabiendo que va a terminar, ¿por qué empezar algo que tenga que parecer agradable si sabes que tarde o temprano va a acabar? no sé. 
Quizás porque queremos engañarnos, queremos que todo sea como nosotros desearíamos. 
Pero no, já...por querer...por querer quisiera que esto no tuviera fin. 
Pero supongo que algún día de mi vida, se me acabaran las fuerzas para poder expresarme, se apagará mi voz, aunque no mis palabras, estas quedarán bien grabadas, de alguna manera u otra, pero quedarán.
Creo que ya he dado un comienzo a este pequeño trocito que quería traeros hoy. ¡Allá voy!

¿Sabéis ese momento, cuándo queréis decir todo lo que sentís, lo que lleváis días, semanas, meses, e incluso años intentando soltar? 
Bueno, pues creo que es el momento idóneo para soltarlo, ya no aguanto más y como están mejor las cosas fuera que dentro, veo necesario sacarlas, pero no de mí, si no de mi boca, a través de mis yemas de los dedos. Le doy comienzo a algo que espero que se me quede clavado cual espinita en el corazón; sí, como tú.
Llevo tanto tiempo callándome cosas...que ya no sé como expresarlas, es un fastidio porque no tengo ni tiempo ni espacio para poner todo lo que he callado, pero lo voy a intentar.

Espero que algún día leas esto, y que te haga pensar, o por lo mejor recordarme. Qué tonta soy...es hablar de ti, y que me tiemblen las manos, el alma. Recuerdo todos y cada uno de los gestos y detalles que nos dijimos; muchas veces me digo, ojalá pudiera olvidarlos, olvidarle, olvidarte, pero hay cosas...y personas, que nunca podremos olvidar, en verdad ni debo, ni quiero, ni puedo olvidarte, eres algo que forma parte de mi, no podemos olvidar algo que llevamos en nuestro corazón. Hay veces que me gustaría tener demasiadas respuestas, para las que casi no hay preguntas. ¿Por qué?, esa es la pregunta más común que abunda en mi. ¿Por qué a ti? ¿Por qué a mi? ¿Por qué quererte? y no, aún no he encontrado esas respuestas, y aquí sigo, esperando a que el tiempo me las escupa, a que me de un motivo por el que seguir queriéndote, por el que seguir intentándolo, por no rendirme. 
Enamorada, no, en realidad...¿qué es enamorarse? seguro que si pregunto esto a cualquiera, me dice, pues enamorarse es querer, amar a alguien. ¿Se puede querer de odio? ¿Se puede odiar por querer? en fin, pienso que sí. Que hay veces que no puedo contigo, que no te aguanto, o bueno, más bien, que no aguanto el quererte. Pero que sin duda alguna, ganan las veces que te quiero, que te quiero a mi lado y conmigo. 

Puffff...si es que no tengo ni idea de como expresar lo que siento ahora mismo hacia tu persona.
Hay veces, demasiadas, que exagero lo que siento, porque es así como me creo que es, algo exagerado, algo que duele, pero que gusta. Que ya era costumbre hacer charcos cada semana, que llevaban unas gotitas de ti. Pero ya no, espero que no, porque me ha llegado a desgastar tanto, que no era yo. De estar mal por una razón, tú. Pero ya se acabó, por fin me he dado cuenta de que esto sigue, con o sin tu compañía, que si es con ella mejor, pero que si es sin ella aprenderé más y mejor. Que me gustaría que estuvieras ahí, joder.
Y en cierto modo sé que lo estás, sin expresarlo, sin sentirlo, sin saberlo, pero estás.

No puedo olvidar algo que forma parte de mi, algo que me llena, algo que me da ánimos para seguir, por eso he decidido seguir el camino, contigo pero sin ti, sin tu persona, pero si acompañándome en lo más profundo de mis entrañas. Que ni te he olvidado, ni te olvido, ni te voy a olvidar, que has sido y serás, mi pequeña debilidad. 

Be.

A flor de piel.

Cada vez estoy más convencida de lo que quiero,
pero no puedo;
dicen que querer es poder,
pero no me conciencio.

No puedo seguir así,
dicen que el tiempo todo lo olvida,
pues será el único,
porque todo se me va cuesta arriba y no,
no puedo seguir así, pero quizás
en estos momentos es cuando hay que reaccionar,
y darte cuenta de que si tú estás mal, te van a apoyar,
e incluso ayudar, pero no pueden ponerse en tu lugar.

Así que sigue, mira al frente, pisa fuerte,
que no se diga que no eres valiente,
que no se diga que no eres FUERTE.

Belén del Caz Maroto.

Rachas primaverales; tocada, pero no hundida.

¿Sabéis esa sensación de sentir que vas perdiendo la ilusión por todo?
Supongo que ésa es la razón por la que me he dignado a escribir sobre una nueva página en blanco.
Doy por comenzada mi racha primaveral de desahogo.
Últimamente no tengo ganas de nada, la sonrisa sincera que siempre llevaba encima, se ha convertido en una sonrisa por costumbre, en casos excepcionales, de esas veces que personas especiales (que quedan pocas) te logran sacar la sonrisa sincera. Nunca pensé que la frase "El dolor cambia a la gente" fuera a ser tan cierta como traicionera. Me da pena, que en plena juventud tenga que estar quejándome de estas cosas, que muchas veces son insignificantes comparadas con cosas mayores, pero que aún así me hacen estar pésimamente negativa, pero ver como personas que, mirando atrás en el tiempo, estaban a tu lado y que a día de hoy estén, pero distantes y lejanas o incluso irreconocibles, duele, duele se mire por donde se mire. 
No todo va a ser negativo, también existen ese tipo de personas que aunque tengas mil errores con ellas, están ahí, apoyándote mano a mano, puño a puño, pero por desgracia se pueden contar con los dedos de una mano.
Es triste, sí, lo es.
Cada día que pasa, me doy cuenta de que cada vez me encuentro más sola, rodeada de mucha gente, es algo difícil de entender, pero estoy segura de que alguien que esté leyendo esto, me entenderá. 
Cómo me gustaría tener el privilegio de la inocencia, de hacer las cosas y no ser consciente de lo que pueda venir, o serlo y que te dé igual. En verdad, es que ya me da igual lo que pueda pasar, 
¿por qué? empeorar, no creo que vaya a peor, así que, me queda la esperanza de que en un tiempo, largo o corto, todo vuelva a su curso, no pretendo que vaya a ser igual de fascinante, pero sí que vuelva a la normalidad, dicen que después de la tormenta, llega la calma y me baso en nada más y nada menos que en eso. Que los buenos momentos están a la vista, que dentro de poco todo irá viento en popa, como me gusta a mí. Espero poder recuperar a esas personas que están ausentes, pero que están a mi lado, no como yo quisiera, no como antes, pero que están.
Y en fin, lo que más me gusta de mi, es lo positiva que llego a ser aún estando destruida, pero estoy, que eso es lo importante. Otra faceta que tengo, es que ser cabezota hasta cierto punto, tiene sus ventajas, no voy a dejarme evadir por esta racha mala, voy a intentar salir de ella como pueda y luchar por conseguir esa felicidad que en estos momentos no invade el ambiente.

Fmdo: Be.

Es ahora o mañana será demasiado tarde.

Quizás nuestros problemas vengan todos de un punto en concreto. Quizás sea porque no vivímos el presente. Tras mucho tiempo observando a la gente, me he dado cuenta de que, nos preocupamos más por lo que ya ha pasado y por lo que pasará, que por lo que está pasando en el momento. Vivimos con esperanzas de que mañana amanecerá y de que ayer anocheció, no valoramos lo que tenemos en el momento. ¿Y si no hubiera un mañana y no hubiera un ayer? Deberíamos de valorar más lo que tenemos en el instante, porque el pasado ya pasó y el futuro depende de un fino hilo. Nos aferramos tanto al 'qué pasará' y al 'pues pasó' que nos nublamos nosotros mismos la vista. Que lo que tenemos en este momento, alomejor mañana ya no está, y entonces, entonces es cuando nos daremos cuenta de que deberíamos de haber cambiado algo. Valora lo que tienes antes de perderlo.

Fmdo: Belén del Caz Maroto.